Con la piel ocurre como con tantísimas otras cosas en esta vida: si quieres cuidarla de verdad debes conocerla en profundidad. Y, en ese sentido, lo primero que tenemos que descubrir es qué tipo de piel tenemos. Porque en este vasto mundo existen al menos cinco tipos de pieles diferentes: las pieles normales, las pieles secas, las pieles grasas, las pieles mixtas y las pieles delicadas. Tenemos mucho tiempo por delante y volveremos para explicaros cómo cuidar el resto de pieles, pero hoy vamos a estudiar los productos para piel grasa más adecuados.
La piel grasa es un tipo de piel caracterizada por una producción excesiva de sebo conocida como seborrea. Una condición que afecta al modo en que luce la piel y que afecta a muchas mujeres y a muchos hombres. Sus causas son muy diversas y los desencadenantes pueden actuar en conjunción en diferente proporción según la persona. Así, encontramos que mucho sebo en la piel puede venir provocado por la genética, por los cambios hormonales que tienen lugar en diferentes etapas, por un estrés excesivo, por los medicamentos o por los cosméticos.
¿Los cosméticos? Sí, en concreto los cosméticos comedogénicos. Estos son cosméticos que contienen sustancias naturales o artificiales que obstruyen los poros de la piel e impiden que esta respire con normalidad. Es entonces cuando nuestro cuerpo genera más sebo. En ese sentido, resulta imprescindible identificar el tipo de piel y en el caso de que sea grasa dejar de utilizar productos cosméticos que sean comedogénicos. De lo contrario, estaremos acrecentando esa tendencia natural de nuestro cuerpo a producir grasa. Elige productos de piel grasa.
¿Pero qué productos son esos? Pues productos libres de sustancias artificiales como los derivados del petróleo, libres de grasas vegetales y libres de cualquier sustancia que pueda obstruir los poros. Por ejemplo, y en el caso de los desmaquilladores, resulta muy conveniente para las pieles grasas el agua micelar. Igualmente, la mejor crema hidratante para piel grasa es aquella ligera y fluida. Es importante que sean lo más limpias posibles y no haya siliconas ni aceites entre sus ingredientes.
Como apuntábamos, el mejor tratamiento para la piel grasa es mantener en todo momento los poros libres de modo que puedan respirar felizmente. ¿A quién no le gusta respirar? Elige una crema hidratante orgánico y sin ningún tipo de aceite ni silicona. Eso, junto con el agua micelar, podrán ayudarte a reducir el sebo que genera tu organismo en exceso. O al menos a no contribuir a un aumento todavía más excesivo del mismo. Una piel grasa requiere un mimo y cuidado especial. Pero merece la pena por lucir una piel perfecta.
¿Y sabes cómo puedes lucir una piel perfecta, aunque tengas la piel grasa? Con la mascarilla purificante de arcilla con menta de Herbalife Skin. Y es que este tratamiento para piel grasa realiza múltiples funciones en nuestra piel. En primer lugar, la limpia de imperfecciones. En segundo lugar, purifica el rostro. Y, en tercer lugar, aunque no menos importante, la mascarilla purificante de arcilla con menta de Herbalife absorbe el exceso de grasa que producen las pieles con glándulas sobreproductoras de sebo.
Además, esta crema para piel grasa cuenta con la ventaja de que no reseca la piel. Y es que muchos productos cosméticos destinados a las pieles grasas consiguen el efecto opuesto: eliminan el exceso de grasa, pero generan sequedad en la piel. Tan malo el remedio como la enfermedad. Eso no te pasará con la mascarilla purificante de Herbalife. Si quieres una piel brillante, suave y limpia sigue estos consejos: una alimentación saludable, cremas hidratantes y desmaquilladoras no comedogénicas y la mascarilla antigrasa de Herbalife.
