Hay cinco grandes nutrientes en nuestras conversaciones acerca de la alimentación: las grasas, las proteínas, los carbohidratos, las vitaminas y los minerales. Y sí, estos cinco grupos de macronutrientes y micronutrientes son indispensables para nuestro organismo. Los necesitamos para funcionar correctamente. Pero no son los únicos. Con bastante frecuencia olvidamos un componente alimentario que no debería faltar en nuestra dieta: hablamos de la fibra. Solo una dieta rica en fibra –y en el resto de nutrientes esenciales- es verdaderamente saludable.

¿Pero qué es exactamente la fibra alimentaria? Pues un componente vegetal altamente resistente a la hidrólisis de las enzimas digestivas humanas. Es decir, que nuestro organismo no posee las herramientas necesarias para descomponerlo y asimilarlo como haría con otros componentes como las proteínas o las grasas. La pregunta que estás haciéndote es: ¿y entonces para qué sirve? En este artículo exploraremos los beneficios de la fibra para nuestro cuerpo. Pero antes es necesario que entendamos que existen dos tipos de fibra diferentes.

Por un lado, nos encontramos con la fibra soluble. Es la fibra soluble que atrapa agua y que convierte el proceso digestivo en un proceso más lento y paulatino. Por otro lado, nos encontramos con la fibra insoluble, que posee justamente la capacidad opuesta: acelera el tránsito de los alimentos a través de nuestro sistema digestivo. Unos alimentos, como las frutas y las verduras, son más ricos en fibra soluble. Otros, como los cereales enteros, tienen más fibra insoluble. En general, todos ellos son alimentos con mucha fibra. Veamos qué nos aporta.

Beneficios de los alimentos altos en fibra

Los beneficios de la fibra no son mera palabrería. Se trata de verdades probadas científicamente. Como que los alimentos ricos en fibra, especialmente los ricos en fibra soluble, aumentan nuestra sensación de saciedad por su enorme capacidad de absorber agua. Esto nos ayuda a controlar el peso y evitar extremos como la obesidad, sin duda, uno de los principales causantes de muchas enfermedades. Además, este mismo efecto saciante ayuda a quienes quieren mantenerse en un peso determinado. Una aliada del adelgazamiento.

Pero los beneficios de la comida rica en fibra no terminan ahí. Porque la fibra también tiene la capacidad para arrastrar parte del colesterol malo hasta el intestino, donde nuestro organismo lo desecha a través de las heces. De ese modo, evitamos que sea absorbido y que llegue a nuestra sangre, desde donde nos perjudica gravemente. Algo similar ocurre con los niveles de glucosa. La fibra aumenta la viscosidad intestinal y evita su absorción. Un beneficio muy saludable que nos ayuda a evitar la aparición de la diabetes.

Como ves, la fibra es un nutriente fundamental para una vida saludable. Una barrera contra una enorme lista de enfermedades y trastornos digestivos. La nueva pregunta es: ¿qué alimentos llevan fibra? Pues alimentos que ya hemos citado como los cereales de grano entero (avena integral, arroz integral, trigo integral…), las legumbres (lentejas, habas, habichuelas…), verduras (espinacas, espárragos, zanahorias…), frutas (manzanas, mandarinas, plátanos…) y frutos secos (nueces, almendras, pistachos…). ¡Mucho donde elegir!

Cómo mejorar el tránsito intestinal

Casi nos olvidamos de mencionar otro de los grandes beneficios de las comidas con mucha fibra: previenen y alivian el estreñimiento porque, en líneas generales, contribuyen al buen funcionamiento del tránsito intestinal. Por eso para mejorarlo basta con introducir algunos de los alimentos ricos en fibra apuntados previamente. En algunos casos, lo sabemos, llevar una dieta equilibrada resulta muy complicado por nuestro ritmo de vida. Por eso en nuestra tienda online encontrarás un suplemento de fibra y hierbas con todo cuanto necesitas.